viernes, julio 08, 2011

Debilidades aparte...

Si de fortaleza se trata supongo que yo no tengo ninguna. No puedo ni siquiera resistir dos días sin hablarle que ya quiero llamarle o escribirle. Estoy a cada rato viendo si ha entrado al chat para conversar o viendo su número telefónico preguntándome si la debo o no llamar. Es jodido estar así porque no puedes pensar en otra cosa. Y luego cuando está conectada no sabes cómo hacer para empezar una conversación. Piensas en qué decirle y te pones tan tonto que hablas de cosas que ni te gustan o te inventas problemas con ella para pedirle perdón. Así han sido estos días de lluvia y sol, un martirio total que me ha tenido encerrado en un círculo vicioso del que salir es imposible.


Y la culpa de todo la tienen los besos que nos hemos dado, si no hubiese pasado no estaría pensando tanto en ella. Pero no tuve otra opción, pasó así y no sé qué hacer porque no puedo estar con ella. No podemos, por más que me encantaría. Además ella no quiere, es mucho más fuerte que yo y eso que somos del mismo signo. Cuando me ve ni siquiera me saluda. Me ignora completamente y jamás me ha llamado. Y si me ve en el chat pueden pasar horas y nunca me va a escribir, nada, ni siquiera un hola, y menos un chao si acaso le escribo que ya me voy… no escribe absolutamente nada, sólo deja de escribir y ya. ¿Enamorado? No creo, pero me fastidia mucho esta situación. Me fastidia porque estoy pensando todo el día en aquello y pierdo mucho tiempo, y luego escucho una canción, veo algo en la tele, como algo y me acuerdo de ella. ¿Enamorado? Para nada. Ni siquiera le he escrito un poema, eso ya sería una señal clara de que hay algo más. Tampoco la tengo como personaje en mis cuentos, pero sí acepto que a veces me quedo pegado viendo las 847 fotos que tiene en el facebook. Me las sé casi de memoria, y lo que me encanta es que en todas sonríe y hace gestos que no recuerdo haberlos visto antes.


A veces me gustaría no verla más pero para aumentar mi tragedia tenemos tantos amigos en común que la seguiré viendo, tampoco se trata de que me mude, o que cambie de amigos. Pero la situación es muy complicada porque soy tan débil, además cuando ella llega siempre algo nos va acercando, no sé, una canción, un trago, una mirada cómplice, porque hay que decirlo, para eso ella sí que se apunta. Me empieza a mirar y comienza con la risita coquetona que yo, débil como ninguno, me acerco a ella y pasa lo que no tiene que pasar. Su mirada se levanta y parece que se olvida de todo porque le da igual, simplemente me besa. Y lo anecdótico, y por lo que creo que Dios existe, es que nadie lo sabe, nadie nos ha visto, no sé cómo porque pienso que hemos sido más que evidentes, pero ha sido mejor así porque no podemos estar juntos. A ella le causaría muchos problemas, y esa no es mi intención. No sé si le gustaré pero le encanta bailar conmigo, le gusta acercarse, ponerse a mi lado y sabe que cuando hace eso yo no puedo hacer nada y me dejo llevar por su olor, por su voz, por su mirada. ¿Enamorado? No creo, porque allí sí que sería el final. Luego llegan los besos a escondidas y la noche se transforma en lo que menos quiero pero más deseo, y así cada vez que nos vemos. Ya le he dicho que no lo puedo evitar, que cuando se me acerca con la boca entreabierta yo caigo, y lo volveré hacer, por más que no podamos estar jamás juntos.


Está en el chat, se ha puesto al lado de su nick dos corazones al final y tiene como comentario: mañana es el gran día. No tenía que haberlo puesto, es obvio que mañana es su gran día, todo el mundo lo sabe. Yo acabo de cambiarme el nick, no me importa lo que pueda pensar, total...


El amante de las tinieblas dice: Nerviosa, mañana es el gran día, no?


La novia iluminada... “mañana es el gran día” dice: vas a venir?


El amante de las tinieblas dice: Sí, claro, estoy invitado, al final me invitaste al matrimonio... al menos cumpliste tu promesa...


La novia iluminada... “mañana es el gran día” dice: sólo espero que no hagas ninguna tontería...


El amante de las tinieblas dice: ...Nada, tú tranquila, yo soy FUERTE! ;)



2 comentarios:

A. Rodriguez dijo...

No se por qué razón o circunstancia me suena tan conocida esta historia, aunque no hay mejor placer que ser amantes, solo se que en algun momento tenemos la necesidad de abusar y sentirnos debiles.

Carlos Rojas Olivos dijo...

Las historias son siempre las mismas, solo cambian los personajes y el escenario.

El placer es peligroso, en este caso, por la debilidad, por la necesidad, por miles de cosas que uno se pregunta y prefiere no responderse.